Fundación Rosa Iguarán

Turismo Comunitario

Proyecto Turismo Comunitario: Experiencias con identidad

El proyecto de Turismo Comunitario de la Fundación Rosa Iguarán surge como una alternativa sostenible que busca abrir las puertas de las comunidades para compartir con el mundo su riqueza cultural, natural y humana. Esta iniciativa nace del reconocimiento de que el turismo, bien gestionado, puede convertirse en una herramienta poderosa para generar ingresos, preservar la identidad y fortalecer el tejido social.

El turismo comunitario no solo ofrece un viaje, sino una experiencia auténtica en la que los visitantes tienen la oportunidad de conectarse con la cultura Wayuu, sus tradiciones, paisajes y saberes, mientras las comunidades logran visibilizar su legado y obtener beneficios económicos justos.

¿Qué hacemos?

El proyecto articula diferentes acciones que permiten construir una propuesta de turismo sostenible y con identidad:

Objetivo del proyecto

El objetivo principal es convertir al turismo en un motor de desarrollo sostenible para las comunidades, donde se valoren sus saberes, se fortalezcan sus capacidades y se creen oportunidades económicas que mejoren la calidad de vida, sin poner en riesgo la identidad cultural ni el entorno natural.

Este modelo busca que los visitantes vivan una experiencia transformadora y que, al mismo tiempo, las comunidades encuentren en el turismo una forma de empoderamiento, visibilidad y orgullo cultural.

Impacto y beneficios

El proyecto de Turismo Comunitario beneficia directamente a 200 familias, quienes participan en diferentes roles como guías, anfitriones, cocineras, artesanas, narradores orales y gestores culturales. Algunos de los impactos más relevantes son:

Una experiencia transformadora

El Turismo Comunitario no solo es una forma de viajar, es una forma de aprender, respetar y compartir. Quien visita una comunidad Wayuu en el marco de este proyecto, se lleva consigo mucho más que un recuerdo: se lleva la enseñanza de una cultura que vive, resiste y florece en medio de sus tradiciones.

Para la Fundación Rosa Iguarán, este proyecto representa un puente entre la tradición y el desarrollo, demostrando que es posible construir un modelo turístico que no explote, sino que fortalezca y dignifique a las comunidades anfitrionas.

Cada visitante se convierte en un aliado de la preservación cultural y en un testigo del poder de la identidad cuando se comparte con orgullo.